MI PADRE TUVO RAZÓN

Hace unos años atrás, cuando recién hacia mis pininos en el sector público, mi padre aconsejó que en algún momento de mi vida laboral tocará desempeñar cargo de confianza, lo cual es una experiencia maravillosa, y que no lo es cuando debes retirarte y eso suele ocurrir por el cese o la invitación a renunciar, que en la práctica es lo mismo. Puedes haber sido el número uno como funcionario, igual dirán adiós. Y cuando esto suceda -agregó- empaca tus cosas personales, despídete aceleradamente de la menor cantidad de personas, poniéndote un esparadrapo en la boca, y retírate del lugar. Seguidamente, ve a casa y haces catarsis todo el día. A la mañana siguiente, empieza a llamar telefónicamente para engancharte cuanto antes. Se leal, aunque probablemente intentarán enlodarte para justificar tu salida, o tapar alguna irregularidad, pero al final “el de arriba” pone las cosas en su lugar. Eso sí, jamás comentes o preguntes que pasó o porqué. Y, si te cueste mantener la lealtad, recuerda siempre ser agradecido.

En marzo del año pasado, el gobierno designó a Jorge Luis Angulo Tejada como Comandante General de la Policía Nacional del Perú, puesto que desempeñó hasta enero último cuando fue pasado al retiro. De inmediato, Angulo Tejada acusó al Titular del Interior de estar detrás de su alejamiento por no haberle permitido que interfiriese en el proceso de ascensos y asignaciones de altos mandos en la PNP, concluyendo sentirse decepcionado de la mandataria. A los pocos días anunció que presentó una acción judicial para ser repuesto en el cargo, puntualizando más adelante que cuando eso pase, al día siguiente renunciará.

Por su parte, el Ministerio Público, bastión caviaron y enemigo confeso de la señora Dina Boluarte, citó al General en retiro para que declare sobre la denuncia en contra de Víctor Torres, acudiendo este de manera presurosa. En paralelo, algunos Congresistas presentaron moción de interpelación en contra de Torres Falcón. Más aún, legisladores como Eduardo Salhuana han exigido la renuncia inmediata del citado ministro. Esto último, denotaría preocupación dentro del Ejecutivo, toda vez que apenas hace tres meses fue censurado Vicente Romero en el mismo portafolio.

Hasta aquí es evidente el malestar de Angulo Tejada por la forma en cómo fue expectorado. Entendible. Lo que no, son las acciones posteriores que hace y comprometen no solo al gabinete Otárola, sino que profundiza la inestabilidad política del país. Por cierto, una interrogante ¿si hubiera permanecido como máximo jefe policial, igual habría denunciado esa supuesta injerencia del ministro?. Otra. Dos días antes de su salida se reunió en privado con la señora Boluarte Zegarra. ¿le comentó de esto a la Jefe de Estado?. Si así fue, ¿Qué le respondió?.

Lamentablemente, los apetitos personales (incluyendo quizá alguna proyección política) han llevado a un viaje sin retorno a un Oficial General, que muy lejos de mostrar lealtad y gratitud a quienes le brindaron la oportunidad de desempañar tan honorable función, lo hace despotricando. Mi padre tuvo razón, Jorge Angulo no.