FERNANDO CARLOS VINICIO VALDIVIA CORREA

El investido Martín Vizcarra persiste en cambiar las reglas democráticas en nuestra Carta Política, pretendiendo imponer al Parlamento el adelanto de elecciones al 2020, bajo amenaza de una nueva “cuestión de confianza” en caso que dicha trillada propuesta sea desechada (que por cierto así sucederá). Recordamos que hace poco más de tres años, en la primera vuelta de la última elección presidencial, los candidatos más votados, Keiko Fujimori (Fuerza Popular) y Pedro Pablo Kuzcynski (Peruanos por el Kambio), obtuvieron el 39,81% y 20,98%, respectivamente, de respaldo popular en las urnas ; sin embargo, 16 meses después como Presidente accidental, y pese a que nadie votó por él (Sí estimado lector como lee: NADIE), el señor Vizcarra ostenta un 60% de ad populum ( DATUM - Peru21, 7AGO2019 ), gracias a las consabidas encuestocracias y repetidas hasta la saciedad (o mejor dicho la necedad) por los afines medios de comunicación oficialistas. La del estribo: En entrevista en Canal N, la peri

MARTÍN ALBERTO VIZCARRA CORNEJO no abdicará al cargo de Presidente de la República. ¿Por qué no?. La pregunta es ¿Por qué habría de hacerlo?. Veamos: En el 2014 dejó la gobernación regional de Moquegua con el 91.1% de ejecución del gasto (PIM de S/. 569´646,659); es decir, un meridiano éxito, aunque teniendo en consideración que aquel año la población en dicha región fue de 178,612 [1] . Cerca de un año después (diciembre de 2015), PPK presentó su plancha presidencial nombrándolo como candidato a Primer Vicepresidente. Una vez en el poder, PPK lo designó Ministro de Transportes y Comunicaciones (agosto de 2016), cargo que tuvo que renunciar (mayo de 2017) en medio de cuestionamientos por parte de la Contraloría General de la República al haber participado en la irregular firma de la adenda del contrato de Chinchero. Casi de inmediato (septiembre de 2017) tuvo su autoexilio dorado como embajador en Canadá, que le valió - y mucho - el no estar expuesto a la - hasta ese momento - demole

Nuestro Presidente accidental Martín Vizcarra ha declarado desde Huánuco “ Apostamos por el diálogo y el entendimiento como forma para resolver las justas demandas de la población. Somos un gobierno que cree en la inversión privada, pero también en exigir el cumplimiento de las obligaciones, en proyectos con responsabilidad social y respeto a medio ambiente,  no por la fuerza, como pretenden algunos “ [1] . Esta histriónica alocución del Mandatario se contradice - una vez más - con los hechos suscitados recientemente con el enlutado proyecto cuprífero Tía María, cuyos audios muestran al mismo señor Vizcarra azuzando a las autoridades arequipeñas para complotar - y de paso aniquilar - la licencia otorgada a Southern Perú, como efectivamente ocurrió días después con la suspensión por 120 días (entiéndase indefinida) por parte del Ministerio de Energía y Minas. Es evidente que el señor Vizcarra ha perdido totalmente el Principio de Autoridad (si es que alguna vez lo tuvo) deponi

En entrevista para la Revista COSAS, Pedro Olaechea dijo " …. (Sic)…., a la izquierda la asocio con la estupidez y la torpeza…. (Sic)…. ", ensombreciendo el espléndido discurso brindado al asumir el cargo de Presidente del Congreso en el que señaló - entre otros - lo siguiente: “ El trabajo en conjunto entre los poderes del Estado es esencial. Sin embargo, también es importante respetar la independencia que tiene cada fuero para cumplir sus competencias ”, en clara alusión al misérrimo gobierno del señor Vizcarra. Ciertamente tiene razón Don Pedro con esta controvertida frase, pues la izquierda-progre-caviar (y demás términos equivalentes) ha tenido - y continúa así - un paso funesto en nuestra historia republicana, manchados por actos de CORRUPCIÓN. Veamos: El decantado gobierno metropolitano municipal de la señora Villarán, encarcelada provisionalmente por 24 meses; el mediocre (tratando de ser benevolente) gobierno del señor Ollanta Humala, con sendos procesos judicia